Mujeres son 18% más propensas al síndrome del impostor
En muchas ocasiones de la vida profesional, es común que las personas se sientan incapaces de percibir el éxito propio y, con una sensación de inferioridad frente al resto; que no están lo suficientemente preparadas y, que no son lo suficientemente buenas para desempeñar algún rol de liderazgo; sentirse incómodas por estar en posiciones de toma de decisiones o, simplemente aceptar un cumplido por el trabajo realizado.
Esto es lo que es conocido como el “síndrome del impostor”, un síndrome psicológico descrito por primera vez en 1976, que si bien afecta al 70% de las personas -de acuerdo con el estudio The impostor phenomenon, publicado en el International Journal of Behavioral Science-, las mujeres son más propensas a padecerlo, pues de acuerdo con un informe de la Access Commercial Finance en Reino Unido, los hombres tienen un 18% menos de posibilidades de sufrirlo.
Aspectos culturales y estructurales
Vivimos en una sociedad que, por cultura, ha posicionado a las mujeres en trabajos de cuidado, por lo que son normalmente ellas quienes terminan quedándose en el hogar. Pero los tiempos han cambiado y ahora ellas forman parte de la fuerza laboral.
De acuerdo con datos del Banco Mundial, la participación laboral de las mujeres fue tan solo 45% en 2019, comparado con 77% de hombres; es decir, existe una brecha del 32%, lo que sigue reforzando una estructura patriarcal.
Sin embargo, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), informó que ante la llegada de la crisis sanitaria, en abril de 2020, se presentó la mayor pérdida de empleo en el país y, el desempleo lo padecieron, en su mayoría, las mujeres, debido a que se encuentran en actividades y sectores considerados como no esenciales. Ese mismo mes se posicionó como el más bajo en la participación económica de mujeres, con una tasa de 34.97%.
Tan solo en nuestro país, de acuerdo al INEGI, las mujeres aportan el 65.2% del PIB actual, por lo que cerrar la brecha laboral entre mujeres y hombres tendría un beneficio económico para México, equivalente al 70% del PIB, de acuerdo con la empresa consultora McKinsey.
“Las empresas, gobierno y sociedad, deben apoyar a cerrar la brecha de género laboral. Mientras tanto, uno de los pasos que está en nuestras manos como mujeres para combatir la realidad actual es combatir el síndrome del impostor, que puede acechar a aquellas mujeres que son capaces, inteligentes, preparadas y, que dan un valor único; por ello es importante impulsar que se atrevan a pedir aumentos, ascensos, fundar empresas y den visibilidad a sus conocimientos”, menciona Tania Pimentel, directora y fundadora de Women Index.
Consejos para combatir el síndrome del impostor
El camino para combatirlo no es sencillo, sin embargo, Tania Pimentel nos da algunos consejos. Si eres una mujer que sufre el síndrome del impostor, ¡síguelos ya!:
- Reconoce tus puntos fuertes: “en muchas ocasiones, creemos que no somos lo suficientemente capaces para desempeñar algún rol de liderazgo en la empresa donde laboramos; siempre es importante recordarte que el valor que tú brindas, es único e irrepetible; que nadie más va a crear lo que tú puedes crear”, menciona Pimentel.
- Evita compararte: Tania menciona que “las comparaciones solo nos hacen darnos cuenta de nuestras debilidades, y aunque podemos convertirlas en fortalezas, puede sin lugar a dudas, llevarnos a desanimarnos y lo que queremos es que, al contrario, te animes a realizar ese proyecto; a pedir ese aumento o ascenso”.
- Reconoce tus éxitos: a lo largo de tu trayectoria has realizado proyectos de los que te sientes orgullosa, ¡siempre ten presentes tus resultados y destaca estos éxitos!
- Prepárate: contar con experiencia es bueno, sin embargo, la preparación continua y capacitación harán que estés siempre actualizada y puedas alcanzar tus sueños. “En la actualidad, puedes tomar cursos en línea; en tus horarios y a tu ritmo”, comenta. Aquí puedes ver una masterclass gratuita de Tania, para empezar a prepararte.
- Toma acción: “es importantísimo implementar lo aprendido; todo el conocimiento que tienes no sirve si no lo pones en práctica. Si quieres empezar a generar resultados diferentes, tienes que hacer las cosas de forma diferente”, recalca la directora y fundadora de Women Index.
Los retos a los que nos enfrentamos como mujeres pueden ser vencidos, en nuestras manos está el prepararnos para los retos que enfrentamos laboralmente para así poder construir nuestro trabajo ideal.